Durante los últimos años el esmorzaret se ha convertido en toda una tradición de la cultura valenciana. Els “cacaus”, la ensalada, o el vino con gaseosa son algunas de las cosas que nunca pueden faltar en un buen esmorzaret. Aunque lo que queda claro es que por mucho que intentes buscar un buen esmorzaret en Valencia, siempre habrá algún punto negativo, y en este artículo te comentaremos el porqué.
Después de vivir más de 4 años en Valencia, y rodar con la ruta dels esmorzars, algunos de los bares más conocidos de la Comunidad Valenciana, nos hemos dado cuenta, qué es mucho más complicado encontrar un buen bar para almorzar en Valencia qué en los pueblos. De hecho, encontrar un sitio en Valencia donde por 6 € te saquen un bocadillo decente y una buena ensalada es algo fuera de lo común, estos pueden ser algunos de los factores alienten a ello:
El precio de los alquileres es mucho más alto en Valencia que en los pueblos, obligando prácticamente a los hosteleros a subir el precio de los productos que sirven.
La competencia en Valencia es mucho mayor, por lo que prima más la originalidad que elaborar un contenido más tradicional.
Es mucho más fácil conseguir clientes nuevos tratar de mantener a los clientes de toda la vida.
Es por ello que en Valencia solemos encontrar algunos bares y restaurantes que tienen una carta bastante original, con productos nuevos, nuevas elaboraciones, y nuevas formas de tratar los bocadillos del típico esmorzaret. Sin embargo a la hora de buscar buena esmorzar tradicional, dónde prima la elaboración del producto de toda la vida, es mucho más claro que es mucho mejor hacerlo en los pueblos.